Sin
explicación
No creo que nadie lo entienda, pues hasta para mí, es
complicado de explicar. No pretendo que nadie lo entienda, pues es una
cuestión, que va más allá de lo personal. No deseo que nadie lo entienda, para
que no deje ser, lo que ya es. No es un secreto inconfesable, ni un problema
por resolver. No es un enigma del corazón, es algo tan sencillo como difícil a
la vez. Y por ello vivo mí día a día,
sin tener nada que decir. Vivo lo que siento, callado de ante mano, sin
palabras que añadir. Realidad o sueño, ella, es solo parte de mí.
Esperar paciente el tiempo que sea necesario, para ver su
sonrisa, cruzar la puerta de mi ser. Ver como se acerca hacia mí, bajándose de
sus tacones. Descalza y de puntilla, agarrada a mi cuello, dejar que me susurre
al oído, sin palabras, un infinito te quiero. Sus manos manosear, y su boca
tapar mi respiración. Es remover sin azúcar, un café, embobado en su mirada. Y
si no tengo nada que decir, poderla besar. Sentada sobre mí, con el pecho
descubierto, desahuciar el tiempo de nuestras vidas, y nadar mar adentro. Es
jugar cómplices de la oscuridad, hasta ver la felicidad, en la luz de sus
labios. Es respirar por su piel, el excitado
tañido de mis latidos. No importa el lugar, ella lo hace diferente. Improvisar,
cogerle por la cintura y bailar “Stay”
de Jackson Browne. Te hace perder el alma con quererte rozar. Es un ángel que
te hace volar, olvidarte del mundo entero, y sentir lo loco que estas, por todos
sus huesos.
Aunque lo parezca, no somos novios, no. Decir que somos,
tiene su dificultad, nadie lo va a entender. No somos novios, y nos amamos sin
final. Nos extrañamos cuando nos vemos, y cuando nos echamos a faltar. Es mi
felicidad, y lo es todo para mí. Es la razón de mi vida, y es ya parte y todo de
mí. Pero no somos nada. Son cosas que pasan, y no se pueden explicar. Solo ella
y yo, nos entendemos, no hace falta más.
1 comentario:
Bonita historia, hasta puede ser verdad.
Publicar un comentario