martes, 30 de diciembre de 2014

El principio del fin

El principio del fin



            Todos somos hijos de nuestras propias circunstancias. Y en estas fechas tan marcadas mundialmente, deberíamos suscitar algunas reflexiones, dentro de cada uno de nosotros. Sufrimos la falta de tiempo, llegamos tarde a todo, a pesar de ir siempre con la lengua fuera. Parecemos estar siempre perdidos en una tierra extraña. Enfrascados en incontables lecturas taciturnas nada esperanzadoras, y de poco calado poético. Albergamos y cultivamos, pobres y dispersos pensamientos en el corazón. Elegimos constantemente un punto de inflexión en nuestra vida, para cambiar algo en ella,  que siempre queda como anecdótico. 
             Viajamos por este mundo, la mayoría de veces sin demasiado entusiasmo, envueltos en una controversia con nosotros mismos. Nos conducimos a un punto de ahogo, y depresión, cansados por llevar adelante nuestros sueños. Somos seres maravillosos, en la mayoría de las ocasiones, saturados de los valores de la vida. De costumbres tan cotidianas como extravagantes, tenemos que escabullirnos de los compromisos diarios que nos atan y condicionan. Experimentemos un arrebato pasajero, de entusiasmo, que nos dé una salida diferente, distinta y emocionante. Seamos nosotros mismos, y a la vez un poco de los demás. Contemos con los dedos de la mano, volvamos a dibujar en la tierra con los zapatos, y sonriamos sin razón alguna. Que un reloj, doce uvas y una multitud no sean la excusa. Mis mejores deseos para vuestros sueños.

jueves, 25 de diciembre de 2014

Ensoñacion

Ensoñación


            En la radio sonaba una canción, me lleve las manos a la cabeza y puse mi frente sobre las rodillas, me enroque. Esboce una sonrisa irónica porque ya estaba en mi burbuja, donde estaría alejado de cualquier mirada, libre de escuchar lo que no quiero oír y donde imaginar es un grito a vivir como tú quieres. Estar aquí acurrucado en este  universo particular, no es como despedirse, es la situación de lo más natural del mundo, para mí no existe otro color. La emoción reside en tener el potencial suficiente para abrazar, con tu imaginación, todas las cosas que te pasan en la realidad. Modelar la mente, alcanzar la inocencia, y esperar que mi cuerpo hiciera el resto. El mundo me parece un lugar muy interesante, y en la quietud de las sombras, intento conseguir que no muera mi sueño. Es una época de tristezas, despedidas, reencuentros y alegrías. Había intentado no pensar en varias semanas, y poder estar a la altura con toda la capacidad, y poder dar lo más precioso que se puede dar. Espolvorear cualquier momento con una sonrisa cariñosa en los labios. Quisiera poder ser más crítico, ya que no entiendo porque nos tenemos que hacer sufrir tanto. Hablar con sinceridad, con un destello en los ojos que hagan olvidar, esos comentarios tediosos de gente que aburre con los mismos elogios adulterados. El mundo está lleno de sensaciones, percibir su existencia en un estado de ensoñación romántica, sentir la calidez de otro ser humano  inundados con una sonrisa de oreja a oreja, y como único momento para disfrutar de verdad. Alimentar la ilusión con las manos sobre su cuerpo, con murmullos de sorpresa, con esas sonrisas incontenibles y mirando con una expresión de ternura y una paz inmensa. Quien quisiera añadir más, cuando un escalofrió me recorre esbozando una sonrisa de satisfacción, y una oleada de felicidad asoman por mis ojos. Hacía tiempo que no tenía un momento tan maravilloso. Reflexionar sentado en mi rincón, con el derecho a equivocarme, y a soltar alguna lagrima por alguna palabra olvidada que te devuelven a la realidad. Lo más importante es la fascinación con la que puedo soñar la realidad.

domingo, 7 de diciembre de 2014

Diciembre


Diciembre




 Paso a paso sobre los cuadros del suelo,
Camino bajo la claridad de la noche,
Siento que ya, a tiempo no llego,
Me duele vivir esta vida, y este derroche.

No quiero perder de nuevo, su corazón,
Y volver a buscarla en cualquier lugar.
No quiero quedarme sentado en un escalón,
Y que su esencia no inunde todo mi hogar.

 Salgo en busca de luces multicolores,
No quiero dejar  nada en manos del azar,
Guirnaldas, exquisiteces, juegos y flores
Todo lo necesario, para poder celebrar.

Quisiera tener algo más importante,
Que conseguir mil artículos mundanos,
Deseo  sonrisas, abrazos y  acompañantes,
Necesito sentir un poco de calor humano.

Cayeron todas, y ya solo queda una.
Ninguna se fue sin pasar desapercibida,
No es que no signifiquen  “na”,
Pero van marcando toda nuestra vida.

Al final dicen que siempre esta lo deseable,
Pero yo prefiero caminar, y sufrir todo el viaje,
Y lograr abrazar lo inalcanzable,
Trabajando con tesón, entusiasmo y coraje.

Me llena de orgullo y satisfacción,
Aunque nunca sea el Rey, ni por un día,
Enviaros mis mejores deseos con emoción:
 “Feliz Navidad a todas vuestras  familias”

domingo, 30 de noviembre de 2014

ONE

       O N E
       
De cara a la galería diría, que a pesar de la oscuridad el cuadro se ve limpio, con un sencillo dibujo, lo suficiente para transmitir la idea principal de la obra. La imaginación te lleva a la figura seria del personaje, principal y ausente. La limpieza visual de la escena se crece, con el toque de luz que muestran los objetos. Hay un equilibrio en el manejo de los colores que da  personalidad a la obra. La imagen esta trabajada con detalles de realismo, sin exceso de pretensiones. La calidad de la pintura es un claro reflejo de la sensibilidad del autor. No tengo palabras, estoy impresionado. Siempre me han seducido ver en un cuadro las telas, los encajes y bordados, como los de la pintura. Simplemente me emociona la tranquilidad del cuadro, yo viviría dentro de él. Sin verlo todos podríamos imaginarnos una pintura, un paisaje o bodegón. Ensalzar con un juego de palabras, la grandiosidad de una obra de arte, un buen vino, o el paisaje más asombroso no es difícil. 
Pero si tuviéramos que hablar del autor, las palabras no parecen reales. Idolatramos en exceso, por puro interés, para quedar por encima de todo. Calificamos y opinamos con la ligereza de ser unos entendidos en cualquier materia. Y pecamos de no ser justos, y sobrepasarnos en el reparto de adjetivos. Desde luego no soy un superdotado, pero me considero bastante inteligente y muy observador de todo lo que se mueve a mí alrededor. Y no pienso rebuscar una colección de adjetivos para hablar de alguien importante, naturalmente para mí. Pues ya guardo en mente, y por supuesto en el corazón, conceptos distintos y a la vez complementarios, que encierran la definición perfecta en una sola palabra, amigo. Tiene un formato tan diferente, un perfil muy particular, la configuración más apropiada, y que supuso un cambio en  mi vida. Puede que todos seamos diferentes en aspecto, pero todos vivimos vidas bastante similares, con las mismas alegrías, penas, y cánticos.
         Hay muchos momentos para reseñar, que tienen en común ese vocablo de cinco letras, aunque muy bien no sabría ciertamente cuando empezó todo. En el origen de todo, como el génesis, intervienen diferentes factores y hechos, que hace saltar la chispa con la porción mínima de compartir algo en común. La mitad de su ser es ser el número uno, el otro cincuenta por ciento paz, compañía, conocimiento y alegría. Quizás el momento que recuerdo con más sensibilidad, en el que tenerle cerca fue un alivio, fue en la perdida de mi padre. Hubo muchas personas, conocidos y amigos, pero con él ya había forjado una unión con unos valores difícil de romper. Recuerdo una salida al monte a buscar níscalos, siempre recordare a su padre a diez metros de mí, recogiendo los que encontraba y avisándome de los que yo pisaba. Los dos teníamos dos casas, pasamos a ser algo más que dos compañeros de clase, con una muy buena relación. Disfrutamos por igual de nuestra época de estudiante y de los compañeros. De aquellas dos chicas que alborotaban con sus ojos el recreo, que consiguieron que caminásemos juntos  a la luz de la luna. De preparar los exámenes en serio y en broma, junto a los Monty Python. De pintarnos unas sonrisas, desnudos,  manguera en mano. Y de ser prácticamente una pareja compenetrada, hilarante e imbatida jugando al frontenis. Sabíamos compartir confidencias y sueños, acompañados de unas cuantas Voll-Damm bien frías. 
Puede que al igual que todos no sabíamos que íbamos a ser en el futuro, pero si teníamos claro que queríamos ser antes y ahora. Seguiremos soñando en mañana, disfrutando y viviendo el hoy, con la gente que nos rodea. Seguiremos atesorando, cultivando y defendiendo la confianza y el afecto. Seguiremos con el mismo desorden, divirtiéndonos, y siendo dos buenos amigos.



viernes, 21 de noviembre de 2014

La espera

La espera


Me esperas,  que yo también te espero.
Esperamos, porque no juntos los dos.
La espera es  un rotundo sí quiero.
No esperemos a  ser invitados.

Miel en los labios, dulce es la espera,
Quien espera sin esperar, un beso furtivo.
Si tú eres la espera, me desespera,
Renuncio a todo, por esperar tu imperativo.

Vale la pena buscar a quien esperas,
A esa que no espera, a darlo todo por ti.
Confiar y no esperar, buscarla a ciegas,
Esperar y no verla, es todo un sin vivir.

Es difícil la espera, si ella no llega.
El deseo se altera, y emana el temor.
El sonido del silencio, mi mente quema,
Espero, y me preparo para lo peor.

Espero  que me pregunte, que quiero.
Espero no ser cómplice del miedo y huir.
Espero abrumarme con todo tipo de peros.
Espero abrazar al hombre hasta sufrir.


Solo sé que siempre te estaré esperando.
Si no me encuentras, espero no desfallecer,
Que la vida me dé motivos para seguir soñando.
Que la  espera sea el inicio de cada amanecer.

martes, 18 de noviembre de 2014

Pesadilla

Pesadilla




Solo quiero salir corriendo y no parar,
Alejarme, y huir de esta angustiosa rutina,
Deseoso por descubrir ese perfecto lugar,
Donde mi libertad sea repentina.

No quiero oír más, esas risas sin sentido,
Ni soportar sus atrevidos desplantes,
No quiero malgastar ni un latido,
Ya consumí resignado, todo mi aguante.

No es vida, vivir y estar arrinconado.
Sueño con salir y tocar la claridad del día,
Dejar atrás este encierro enconado,
Andar mi camino y respirar otra alegría.

Cruel pesadilla, que me hace huir sin parar,
Malditas esas sombras que me tienen en pena,
Arrancaría de esta vida su amargo pesar,
Quisiera, acabar de una vez, con esta condena.

 Su voz, como un eco en mi interior,
 Retumba y se reitera en mi conciencia,
Me arrastra y convierte en un ser peor,
Quedando a merced de su maleficencia.

Como levantarme cada amanecer,
Con la mente desgarrada, hecha harapos,
Bajarme al mundo y no enloquecer,
Hastiado de enfrentarme a tantos sapos


Sueño con ansia  despertar en un sueño,
Saber que no haya nada que lo pueda turbar,
Dormir despierto, despertar risueño,
Encontrarme esa paz, llamada felicidad.

sábado, 15 de noviembre de 2014

Fuego


                Fuego



                Dicen que recordar es para aquellos que han olvidado. Nunca se me dio muy bien pensar, y recordar esa parte del vacío que había en mi cabeza. Tengo un fuego dentro que lleva dando vueltas en el espacio y en el tiempo. Una confabulación del destino y la mala suerte, dejo esbozado en un lienzo, dejarme relegado a vivir sin ella. Mis ojos llorosos no sueltan lágrima alguna. Aunque no es que importe demasiado, había sido la peor de mis pesadillas, la silueta de una mujer bañada en sombras que se aleja una y otra vez. Aun así, me quedaba extrañamente sosegado, sin poder seguir la huella de esa mujer. Y en lo más profundo de mi interior, un aullido palpitante y ensordecedor, se hace constante y me deja resoplando como un animal herido. Quisiera satisfacer mi curiosidad y dar respuesta a muchas preguntas, tener la certeza incuestionable de poder recuperar mi tiempo maltrecho. Mis pensamientos se vieron interrumpidos, malogrando cualquier atisbo de su pasado. Jamás hubiese creído sentir, todo aquello que no es perceptible por los sentidos.  Me siento estrafalario por la imaginación vivida, y por la vida imaginada, cuantas combinaciones maravillosas habríamos compartido con todos los detalles, la partitura de nuestras vidas. He cosechado una buena experiencia a lo largo de estos años, fuente del convencimiento, que no hay tiempo que perder. Siento una autentica debilidad, por abandonarme a las palabras que nacen de sus labios, por oír y callar mis opiniones, e iluminar mi visión con otra realidad. La he buscado por todas partes, sin haberme movido apenas. La he pensado ahogada en mil detalles, de mil maneras, como una Reina. No sabría señalar cual habría sido el momento decisivo, para dejar de hacer filigranas con los pensamientos, quitarme todas las ataduras, y poder navegar por las nubes con libertad. Llevo esperando mucho, mucho tiempo. Creo que ha llegado el momento.                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                         

domingo, 9 de noviembre de 2014

Sigo

Sigo





Nueve largos meses para subir a este barco,
 Con la ilusión de hacer una buena travesía,
 No he visto  acabar  bien ningún día,
Y  con  cincuenta y dos,  ya estoy harto.

Y no veo el momento de poder bajarme,
Pues todo se vive con una  gran hipocresía,
Y se procede con la más ínfima alevosía,
Aunque ya no hay nada  que pueda cegarme.

Si en verdad pudiera borrar esa falsa alegría,
Nacida del llanto, y la mala experiencia,
Que seres infames reparten con su indolencia,
Haciendo la vida de otros una dolorosa sangría.

Sueño con que esta historia cambie por fin,
Que la razón, y el buen sentir nos visiten,
Y que no sean los corazones los que griten
Que acabe este absurdo, este sin vivir.

No dudaría en vestirme con mi mejor sonrisa,
El día que el cielo tenga igual color para todos,
Que comience un nuevo e infinito periodo,
Y que todo el mundo respire una misma brisa

El corazón es la patria donde yo vivo,
Los amigos, todas las riquezas que conseguí,
Y junto a ellos, saber y poder distinguir

Que mi familia es la razón por la que sigo.

domingo, 2 de noviembre de 2014

Señor Presidente del Gobierno

Señor Presidente del Gobierno:

                Quisiera poder decirle que estoy harto, pero no, más bien avergonzado. Siempre había creído que España era diferente, por sus paisajes, el sol, su cocina y por la grandiosidad de sus gentes. Pero su gobierno está creando una nueva marca España, que nada tiene que ver con la auténtica. Usted sigue viendo solo campos de golf.  A veces le entiendo, cuando sus ruedas de prensa surgen de una tele de plasma, yo las haría incluso con la voz en off únicamente. Cuando alguien de su gabinete sale a explicar algo, y nos deleitan con “los pagos en diferido” de la secretaria General de su partido, o con las explicaciones sin preparar de sus portavoces, incluso simplemente con la risa burlona que nos ofrece, en sus explicaciones a todos, el señor ministro de Hacienda, es para esconderse. Ha permitido que la política de este país, sobre todo la suya, sea un verdadero chapapote.
                Ahora se entiende porque no han cumplido ustedes su programa electoral, tenían otras prioridades. Recortar impunemente las prestaciones sociales. Cerrar camas de hospitales, privatizando la sanidad, para que las listas sean largas y poder desviar operaciones a hospitales privados y cargar las minutas a la sanidad pública. Sigue permitiendo que muchas familias duerman en la calle, por no reformar la ley de hipotecas, y dejar que los bancos se queden con su vivienda además de seguir pagándoles religiosamente. Bancos que han gestionado agujeros negros, que ni Stephen Hawking sabría darles explicación, saqueando los ahorros de todas las personas trabajadoras de este su país, señor Presidente. Bancos a los que su gobierno ha rescatado, con el dinero de los españoles, para después saber de qué maneras tan frívolas se gastaban dicho rescate, tarjetas opacas, jubilaciones indecentes, y sueldos de estrellas de Hoollywood. Donde estaba la CNMV o el Banco de España para controlar tanto descontrol.
                El clamor del 15M se ha convertido en un partido político, al que ustedes tildan de chavista y otros calificativos, que muchos no entendemos. A diferencia de ustedes, ellos y algún otro partido aún no han gobernado, ustedes sí. Pero por si no ve las noticias, en su país hay muchas personas pasando hambre, que tienen que buscar en la basura, que van con unas cartillas de racionamiento para conseguir productos básicos en los bancos de alimentos. Eso lo han conseguido ustedes que son los que gobiernan. Han hecho de España un supermercado, una gran superficie, para hacer negocios y enriquecerse. Sea valiente y coja el toro por los cuernos, y pase a la historia por cumplir con sus votantes y con el resto del país. Es difícil gobernar un país, y muchas veces los programas no se ajustan a la realidad y salen mal. Pero hay cosas que si pueden llevarse a cabo, como dejar que la justicia actué con total independencia, que los delitos de corrupción no prescriban nunca pues van en contra de los derechos de todos los españoles, cambiar las leyes necesarias para que esto se cumpla, cuando a ustedes les interesa lo hacen.

                Siempre aluden a sus once millones de votantes, para recordarnos que por eso están en el gobierno. Pues no se esconda tras el plasma, de la cara, todo el mundo tiene derecho a equivocarse incluido usted. Limpie ya toda corruptela que padecemos en la política, empezando por su partido, ejemplarice. Ningún padre normal, dejaría que un hijo suyo pasara necesidades, durmiera al raso, pasara hambre. Usted es la cabeza visible y responsable de este país, deje de mirar para otro lado, y no desatienda nuestras necesidades.
               

martes, 28 de octubre de 2014

Piel de jabón

Piel de jabón



Te busco, no te veo, pero te siento,
dulce piel de jabón y caramelo,
cuando abrazas mi oscuridad,
excitas mi respirar hacia el mismo cielo.

Sufres en tus poros desnudos,
el fuego incansable de tu razón,
silencias tus sentidos con un escudo,
bordado de quimera y de ilusión.

Fluyen los años como el agua,
ahogando de olvido la memoria,
siguen anclados bajo tu enagua,
momentos teñidos de amatoria.

Buscas a ciegas ese encuentro fortuito,
forzando hábilmente la sed del deseo,
escapan de tu pecho  latidos gratuitos,
seduciendo mi interés, con ese suave siseo.

Llego tarde a mi cita del lejano pasado,
subo escalones con pretensión y osadía,
es un reto, un encuentro impensado,
temor, desvergüenza, y gallardía.

Estar en plenitud y que resuene el campanario,
burlarte de la vida como en una parodia,
sentir al hombre como tú mismo adversario,
convertir el momento en verdadera rapsodia.

sábado, 18 de octubre de 2014

Llegar a viejo

Llegar a viejo


            Hoy se me saltaron las lágrimas, estoy a nada de cumplir un año más, adquisición esta que se unirá a todos los que ya tengo en mi colección privada. No andaba emocionado por este advenimiento, circunstancia que anualmente nos colma de alegrías y otras fiestas.  Me conmovía viendo el caso idéntico de dos personas que tenían ya el final de su horizonte señalado, una no quiere seguir hasta el final y la otra desea que le ayuden a cruzar el último tramo con la mayor dignidad posible. Un día te dicen que tienes algo dentro de ti, que te hará sufrir hasta llevarte al final de tus días, que no hay cura alguna y que no tienes ninguna alternativa. Llevas andado muy poco camino y tu mundo se hunde, no sabes qué hacer con tu vida, que difícil es continuar cuando solo esperas la caída. De pronto sientes un gran vacío, que no sabes cómo  o con que llenarlo, pues el amargo fracaso se ha hecho dueño de tu bien más preciado. Que difícil supone tomar la decisión más importante de tu vida, y nunca mejor dicho. Llevar a término tus deseos, darle forma a tus ilusiones aunque solo sea una vez, despedirte de todos, y cerrar tú mismo la puerta para siempre. La otra persona ya anduvo casi todo el camino, su historia está cerca de un desenlace. Pero quiere seguir siendo el, no adelantar ni un segundo el momento de la despedida. Sabe que llega cansado, algo tullido, pero no renuncia a recorrer erguido y orgulloso la recta final. Para llevar a cabo esta empresa cuenta con su ilusión maltrecha, pero con la fuerza y el deseo casi intactos. Se muestra contento a pesar de tener un  futuro dudoso, pero vive feliz porque goza de un horizonte iluminado,  por la  abnegación de los que los le rodean. Sé que no estoy educado para dejar entrar la vejez en mi vida. Sé que cuando llame a la puerta, querré escapar por la ventana y volver a la edad que tengo ahora incluso menos. Sé que te haces mayor solo de pensar en la vejez, y que llegar a ella no me va a dar la razón. Pero sí quisiera después de haberlo dado todo y con el corazón asustado, llegar a viejo y no arrepentirme de nada de lo que he hecho.

lunes, 13 de octubre de 2014

Quisiera

Quisiera

Quisiera abandonarlo todo y distanciarme de mi destino.
Quisiera saltar a la cuneta y no andar más por el camino.
Quisiera estar desnudo y no sentir ninguna costura.
Quisiera sentirme fresco y no sufrir más desventuras.
Quisiera esconder mi orgullo y enseñar un poco de humildad.
Quisiera comerme el mundo pero ya no hay posibilidad.
Quisiera sentar mi conciencia y no mirar al pasado.
Quisiera no darme cuenta del camino que no he andado.
Quisiera escribir el libro que juntos hemos leído.
Quisiera abrir la puerta que cerré con el olvido.
Quisiera ser arquitecto y poner techo a mis sueños.
Quisiera que mis ilusiones tuvieran ya su dueño.
Quisiera tener más tiempo que malgastar conmigo.
Quisiera regalar al extraño poder ser su amigo.
Quisiera dormir con el sol y despertar con la luna.
Quisiera que todas mis historias fuesen solo una.
Quisiera que mi intuición fuera más insolente.
Quisiera no pensar y actuar sin referentes.
Quisiera cerrar los ojos y verlo todo fascinado.
Quisiera poder abrirlos y que nada haya cambiado.



miércoles, 8 de octubre de 2014

Cuentame

Cuéntame



Me senté en el bordillo de la acera con cierta dificultad, gracias a esa cincuentena de años de mi propiedad, mis piernas un poco largas, y ese suelo demasiado lejos de mis posaderas. De niño lo hacía mucho, buscar donde sentarme, y observar todo a mi alrededor. Sentado en la puerta de casa veía pasar a la gente, algún que otro coche, bastante escasos en esa época, y soñaba despierto las fantásticas aventuras de mis superhéroes. La vida era más tranquila, menos ajetreada, y se disfrutaba más de los momentos, quizás más por ser un niño. Yo era feliz leyendo comics al fresco, acompañado en bastantes ocasiones por alguno de mis primos, y compartiendo las risas que nos provocaba la lectura de las viñetas de “Valor y al toro”, una gran historia de Mortadelo y Filemón, o viviendo al límite las heroicidades de mi querido y entrañable Spiderman. Ese niño sigue viviendo en mí, asustado dentro de este envase, que va en busca de su fecha de caducidad. 
Miro en torno a mí  y me siento un príncipe destronado, sin ánimo de llegar a rivalizar, con quien se ha apropiado y  sentado en mi sitio. La mayoría de edad, las responsabilidades contraída, y las cuantiosas horas dedicadas en hacer cualquier cosa, son madrastra e hijas que te empujan a ser una cenicienta sin zapato de cristal. Camino de aquí para allá, siempre con algo que hacer, buscando a la abuela o al mismo lobo, con las prisas del conejo de Alicia en el país de las maravillas, y con mas tareas que los enanos de Blancanieves. Me gusta tener mi rincón  aunque sea pequeño, con todas mis cosas al alcance de la mano, sin intrusismo. Poder estar en varios sitios a la vez, aunque sea con el pensamiento, como el profesor Charles Xavier de los x-men. Todo superhéroe tiene un punto débil, un talón de Aquiles, el mío esta en mantener oculta mi verdadera identidad, en enmascarar mi fuero interno, en saber custodiar todo lo que hace referencia a mi propio ser. Aunque parezca imposible dicen que querer es poder, y que mejor poder que querer, querer  hacer, querer amar, querer vivir.

martes, 23 de septiembre de 2014

El ser mas maravilloso

El ser más maravilloso

Este fin de semana, aunque no es lo habitual, vi televisión. Dos películas muy diferentes una americana “Doble traición”, y una española “La guerra de papa”, con una diferencia de veintidós años una de la otra. La primera  reúne todo lo típico de las cintas de acción, persecuciones, disparos, traiciones, asesinatos, la típica ensalada de las filmes americanos.  La otra está basada en la obra de Miguel Delibes “El príncipe destronado”, y que fue dirigida por Antonio Mercero. Tanto en una como en la otra, suceden dos escenas casi idénticas, con el mismo sentimiento aunque con distinto significado emocional.  Es curioso pero casi todo en esta vida está conectado a algo o a alguien, las nuevas tecnologías, miles de cables, asociaciones, grupos, redes sociales, sería una lista interminable. Todos tenemos  o estamos inmersos y conectados con el resto del mundo queriendo buscar una razón para estar ahí, y compartir un sinfín de experiencias, sensaciones y sentimientos, la mayoría de ellos generalizados y con falta de valor. Ninguna de estas asociaciones o relaciones humanas podrán alcanzar la emoción y la sensibilidad de cualquiera de las dos escenas que vi este fin de semana. En la primera un niño de corta edad lleva seis años sin ver a su madre, la cual le dijeron había fallecido, la madre le pregunta si se acuerda de ella y el niño lleva la mano de esta a su rostro cerrando los ojos y estremeciéndose. No hizo falta una respuesta afirmativa, el simple gesto le dio al niño toda la fuerza, para borrar esos años perdidos y sentir todo el cariño de su madre, con solo sentir la caricia de su mano. En la otra escena de la Guerra de papa, el niño protagonista, tiene miedo y no se puede dormir. Llama constantemente a la criada con cualquier excusa para estar acompañado, esta se cansa y finalmente llama a su madre. Su madre le intenta tranquilizar, se sienta al lado de su cama,  él le pide que le coja de la mano, momento en el que desaparecen todos sus temores.
“Una madre y su hijo iban a cruzar un rio, la madre le dijo: - hijo coge mi mano-. El le respondió: - no mama coge tú la mía-. La madre respondió: -¿Cuál es la diferencia?-... Si algo pasa cuando crucemos, quizás yo suelte tu mano, pero si tú tomas la mía, estoy seguro que pase lo que pase tu no soltaras la mía.
El amor de una madre es eterno, desinteresado, fuerte, sin imposibles y no hay nada en este mundo que se pueda comparar con él.



domingo, 31 de agosto de 2014

El ultimo cromo

      El último cromo

            Vivimos en una época donde ensalzamos cualquier nimiedad,  con tanta indolencia y compartiéndola con todo el mundo, con la misma  alegría con la que hacemos participes a familia y amigos del nacimiento de un hijo, que desatino. Un verdadero dislate, etiquetarlo todo con un “me gusta”, lo hacemos con todo y con todos. Que alguien muestra una foto, no importa ni la calidad, ni como este posando, “me gusta”. Que colgamos un vídeo de la cosa más absurda y con un interés más bien escaso, “me gusta”. Que plagiamos un pequeño texto, haciendo referencia a cualquier recomendación sobre la vida, “me gusta”. Y si nos lanzamos a la piscina, y queremos hacer un comentario escribiendo más de dos palabras, mejor nos hubiera ido dándole al “me gusta”.  Incluso lo hacemos con personas que ni conocemos, ni siquiera de vista. Ya no valoramos nada, ni parece que demos la importancia que  merece cada cosa. Siempre hemos tenido en mente ciertos valores de la vida, que posiblemente estén en desuso. A los regalos se le da un valor sentimental, por alusión a la persona que hizo el regalo, pero siempre cuando hay una tercera que nos oiga decirlo, para podernos vanagloriar bien,  sino no tiene valor. Valores familiares esos lazos que nos unen en navidad, y que nos tienen nominados el resto del año. Y con el hándicap de cuidar a esos ancianos que nos dieron todo, que estorban lo suyo, y que tienen la fea costumbre de dejar siempre algo en herencia. Y el narcisismo, esa admiración en exceso que algunos sienten por sí mismos, esa presunción de que su valor personal no es cuestionable,  por estar afectado de una vanidad exenta de humildad. 
           La importancia que le damos a las cosas, los valores y principios morales que sirven de guía en una sociedad, y esa apreciación que tenemos de ciertas personas por sus cualidades, su capacidad y su honradez, porque no podemos tenerlas presente en todo momento y en cualquier lugar. Recuerdo cuando empezaba una colección de cromos, con toda la ilusión de un niño, y con el ansia de acabarla rápidamente. Comprar los sobres con los cromos, cambiar los repetidos con los amigos de clase, conseguir aquel tan difícil era toda una aventura. Pero el más importante de todos, el que tenía un gran valor, el que hacia olvidarte del resto, el que ponía un broche de oro a la colección, sin duda alguna era el último cromo. Todos eran importantes, pero ese último tenía un valor especial, que solo tu sabias y que no necesitabas gritarlo a los cuatro vientos, ni etiquetarlo con un “me gusta”, alcanzaba un valor sin precedentes. Siempre las cosas más simples, las más ingenuas, y las más sinceras consigue  un valor incalculable, y se hacen dueñas de tu corazón.


martes, 19 de agosto de 2014

Corazón

Corazón

           
            Que alegría que vuelvas a ponerme nervioso, que contento cuando excitas sin más mi piel, que gozo sentirte de nuevo, que hilarante tu risa de juez. Te sigo desde muy niño casi con el primer andar, mis manos te buscan inquietas, queriendo acariciar tu arrullo, esa nana delicada y suave, que me domina y me hace tuyo. Quiero seguir tus pasos, ser fiel a tu camino, sentirme seguro al respirar tu esencia, y juntos hacia un mismo destino, ser tú único amigo, tu voz y tú conciencia. Jugar cerrando los ojos, y extender los brazos al viento, saber que en todo momento que tocarte en cualquier lugar, es rozar el cielo y perder el sentido, te digo y no miento que es la pura verdad. No te hice caso en todo este tiempo, y acabe enfermizo en una oscuridad. No quiero creer que en ninguna circunstancia me dieses la espalda, sin motivos y con maldad. Que felicidad sentir esa mirada ciega, la dicha de que me llames solo a mí, que me colmes de bondad infinita, sueño abrazarte aunque estés dentro de mí. Creo tener el derecho a saberlo todo de ti, cuando sufres, porque lloras y que te hace reír. Sé que no gastas malicia, y te aflige cualquier cosa, que huirías sin pensarlo dejándolo todo atrás, pero aun llevando siempre disfraz, te pesaría como una losa. Caigo al vacío cuando no oigo tu voz, y un sudor frio recorre mi ser, no quiero caer en ese sueño malsano, que enfermizo me duerme, me aparta tu mano y me atrapa en su red. No puedo aplaudirte, y mucho menos juzgar, no voy a herirte por una mera opinión, formas parte de mí y pensamos igual. Quiero seguir eternamente contigo… corazón.




domingo, 17 de agosto de 2014

Entre estas cuatro paredes

Entre estas cuatro paredes

Y entre estas cuatro paredes y el cielo,
me asaltan las indecisiones,
es tu fría sombra o su oscuridad,
tu sonría o sus razones.

Quisiera y debiera poder olvidar
Y no mirar de frete al pasado
mi corazón no ha podido sentenciar,
entre tu luz y su reinado.

Piel de espinas y de contentos,
que no me dan un triste respiro,
tus palabras, sus lamentos,
tus pasos, y su apacible camino.

Son tus ojos y su inocente mirada,
que me nublan la razón,
entre estas cuatro paredes y el suelo,
trémula el amor, el deseo y la pasión.

Entre estas cuatro paredes y el techo,
se yergue un laberinto malvado,
que me está afligiendo el pecho,
que me impide estar a tu lado.

Entre estas cuatro paredes,
sueño con haber soñado,
amanecer sentado frente al mar,
con mis sueños sentados a mi lado.

martes, 12 de agosto de 2014

Junto al mar

Junto al mar

     Desorientado por las incontables huellas que hay en la arena, rodeado por un ingente número de cuerpos medio desnudos, que se mueven de aquí para allá como alma en pena, triste por no saber disfrutar de este momento tan crudo. Puede ser cosa mía o quizá una contrariedad, pero es pura satisfacción y una felicidad difícil de conseguir, poder estar entre tanta gente y no verlos de verdad, bonito sueño cerca del mar y cuando estoy junto a ti. Aun cuando estoy bien acompañado suelo sentirme solo, estoy solo incluso estando conmigo mismo. Lejos de agraviar a mis acompañantes, quisiera estar en el mismo polo, porque mi mente se mueve veloz en busca de un espejismo. Hay sitios por doquier y momentos infinitos, para evadirme sutilmente y parecer que no estoy. Uno de ellos es estar sentado junto a la mar, si ya sé que es un mito, viendo el eterno nacer de las olas, una tras otra y el oírlas llegar. Desde el horizonte hasta la arena mojada, se acercan cambiando su color, vuelan juntas hermanadas bramando su canción. Buscan a ciegas en la orilla, encontrar un soñador, regalarle una estola blanca y besar sus pies con tesón. No hay nada más que me cautive, como es la inmensidad del mar, te atrapa cuando le miras, te seduce al mojar tu piel, y una vez en su red quien se quiere liberar, aunque sufrieras una mutación que sumerja todo tu ser. No me canso de fantasear mirando el horizonte, para tener una vida plena, de paz y sosiego en la más profunda oscuridad. Todo es magia, todo es sueño, sin moverte de la arena, guardo amor juegos y penas como Joan Manuel Serrat.







sábado, 2 de agosto de 2014

L A T I D O S

Latidos


Escribo en mi respiración el tañido de su nombre, resuena mi razón que oculte de por vida, protegida por designio de este  hombre, que  supo soñarla bien pero no vivirla. Peldaños de esa infancia que temí pisar junto a ella, languidecen en el recuerdo porque nunca los subí. Los latidos, enfundados como balas de metralla, anidan este oscuro corazón que no ha dejado de sufrir. Turbado por los años, mi silencio jamás pronuncio una palabra, con las manos atadas de indecisiones, acaricie el dolor más inhumano, y mis ojos encanecidos siguen clavados en el cielo más lejano. Todo este tiempo negado, murió lapidado, de la forma más macabra. La historia no está vacía, aunque las páginas sigan en blanco, los sueños iban llenando la parte que no se escribía. El tiempo paso deprisa, y los años doblegando, jamás descuide el faro que fiel trazaba mi guía. Me acomode en una nube contemplando el devenir del mar, y aunque la vida quiso que ella no fuera consciente, su esencia siempre estuvo más viva que presente, y no tuve en ningún momento razones para olvidar. De vuelta de todo no estoy ajeno a mis dudas, escrupuloso, en los mismos errores volvería a caer. Repetir la misma historia seria la peor de mis curas, pero un reencuentro inesperado, no lo dejaría correr. Le quisiera desilusionar en otra oportunidad, sabría cuál es la razón y por qué no fue elegida, un sentir tan puro que suena irreal, por prometer más ilusión que un querer de verdad. Es la persona más buena, que tiene un gran don, ser su amigo es mucho, amarla y quererla una ilusión.



lunes, 28 de julio de 2014

Q u i s i e r a

         T e    Q u i s i e r a    

           



            Quisiera darte el perdón, pero ni siquiera tengo derecho a juzgarte. Quisiera poder besarte, pero perdí mi ocasión. Quisiera no haber tenido respuesta, pero provoque una cruel situación, preguntarte fue la gesta, perder fue mi canción. Soy un adicto de la inseguridad, y el horizonte siempre es oscuro, ese día todo era vitalidad, hasta que cambiaste el futuro. Tuvimos ratos de conversación verdadera, momentos que tienen los buenos amigos, en los que se mira de otra manera y en los que fuimos únicos testigos. Contentos de disfrutar, aunque tú ya no lo mientes, nuestras risas se quisieron enlazar, pero no era yo el mejor pretendiente. Era un respirar sano, solo verte reír, cogerte de la mano me hacía aún más feliz. Nunca llegamos a ser pareja, y muchas veces fuimos dos, solo me falto una reja para llevarte una flor. Quise conocerte más allá de las montañas, quisiera entenderte ahora después de tantos años. Hablar, reír y soñar son tres de los ingredientes, que a pesar del humilde fracaso, fueron suficientes para tenerme detrás de tus pasos. Y aun te sigo viendo con la misma frescura, con tu risa de otra parte, embriagado de locura y deseando como no, besarte. Quisiera olvidar tantos instantes, que para mí siempre existieron, quisiera ser un caballero galante para decirte: “te quiero”.

viernes, 25 de julio de 2014

Naturalidad

Naturalidad

        
         Hay una cosa que te quiero decir, sé muy bien lo que siento y lo que pienso de mí, pero se con certeza que no miento, cuando hablo o escribo de ti.
            Es un momento tan único y natural, ni mucho menos una regalía, ver al sol iluminar el amanecer de cada dia. Todo acontece espontaneo y con absoluta sencillez, como la tranquilidad de tus labios, tu genuina inocencia y el resplandor de tu piel. Esas cosas tan sencillas, a las que llamamos habituales, como reírse con las cosquillas, se hacen tan naturales. Los ríos corren y se purifican en su cauce hacia el mar, y yo peregrino sin andar el camino, me siento divino junto a mi ángel terrenal. Las estrellas no están al alcance del ser humano, y yo sueño despierto, por tocar el cielo cuando me coges de la mano. Siempre la luna llena con la verdad por delante. Esa esencia exultante sigue eterna con el cuarto menguante. Tu presencia, un encuentro incipiente, con el cuarto creciente. Luna nueva ¿Dónde estás?, te extraño a rabiar.

            Gracias por elegirme, me siento muy afortunado, por dejarme ser tú amigo, por dejarme estar a tu lado. Puede que no tenga razones, y que decirlo este feo, pero mi corazón aumenta sus pulsaciones, cada vez que te veo. Quisiera saber tus dudas, y ser tu única respuesta. Quisiera ser la pregunta de eso que vas  a decir. Qué bonita la vida, y cuanta locura me queda, para poderte escribir.

sábado, 12 de julio de 2014

Ese abrazo final

Ese abrazo final


Una idílica playa de aguas cristalinas, una espectacular chica que rompe moldes, una música que te envenena y te seduce a la vez con su mensaje subliminal, ingredientes perfectos para un sensacional anuncio, que nunca llegaran a hacerle sombra.  Yo ya deje de tenerle miedo, pero su mirada seguía siendo inquietante. Sus ojos inertes, esculpidos en piedra,  no dejaban de seguirme a cada paso que daba, sin dejar de observarme. Su cálida frialdad, calaba mi falsa piel de cordero,  y  su férrea personalidad dominante, no dejaba lugar para saber que estaba pensando. Su estridente silencio se hacía con mi valentía, paralizando esa frágil voluntad que apenas tengo. Tiene el cabello largo, rubio dorado, tirabuzones quinceañeros henchidos de sol. Su solo reflejo, deslumbra la mirada más invidente. Descansa en su sillón, dominando cual reina, el aire que se respira. Sus marmóreas manos, duermen abiertas sobre los encajes de su blanco vestido.   Siempre lleva un soplo de vida junto a ella, que está presente allá donde este, y que la propia vida está en ese soplo. Puede no ser un ejemplo de estereotipo, pero tiene las cualidades de una gran persona, su corazón y su humildad. Es culpable de tener a todos bajo su manto, de convertirnos en el centro de sus desvelos, aunque ella no sea el de los nuestros. Hay un pequeño rincón al que todos pertenecemos, donde nadie está excluido, su pensamiento. Tiene una debilidad, una necesidad, su punto débil abrazarte. Sin palabras, con gran sentimiento, para olvidar, no querrás separarte de ella. Solo necesitas un abrazo suyo.